Hay veces que me acuerdo

Hoy es un dia más, sin más...

Otro dia para tachar en el calendario, ¿para qué? para alguna planificación, vacaciones, el fin de semana que se presenta, una venida o una ida.

Hay veces que pienso que estoy desperdiciando mi vida, llenandome de cosas absurdas, porque me acuerdo de otras, esperando borrar de mi mente el dia pasado, y planificando como un robot el mañana, y su tarde.

Somos esclavos del dinero y de lo material que se acrecenta cada segundo

Me acuerdo de las noches de verano sentado en la terraza, sin importar el tiempo, sin esperar a que al dia siguiente sonara el despertador, la brisa del mar, ese fuerte olor a salitre, ese almizcle saboreado, esa rapida idea que rueda de la mente, ese juego que no se deja para despues.

Quizas con lo que me quedaria seria esa pizca de pausa, ese saber de que el tiempo no corre, ese paisaje pasando despacio.

Me he acostumbrado al estres, al no parar y ahora cuando pare, como reordeno mi vida, este simulacro de vida.

Me he dado cuenta que las cosas pasan una vez, y que no hay que desaprovecharlas, pues sino, alguien usará esa opción que tú no has empleado.

Y es que la vida es solo una, aparece y desaparece, crece y mengua y no es una partida de ajedrez en un tablero estrategico.

Y es que a veces me acuerdo como era mi vida antes y lo que he aprovechado y lo que he dejado de aprovechar, pero por desgracia todos cometemos errores, desesperantes o no? quien sabe? no poseemos una bola adivinatoria.

Todo es azar y destino unidos en simbiosis.

Un Origen

La esencia del todo es aquello que llamamos origen.

Lo que se nos descubre nuevo cada día, en cualquier esquina, al abrigo de un renacer

El principio de un comienzo, universo, persona, cosa, cualidad, pensamiento o emoción lo llamamos así: origen.

Pero nos hemos parado a pensar donde se encuentra la base de esta raíz, como es capaz de fructificar y alcanzar metas soñadas, no las nuestras, sino las del libre albedrío.

Cual es su prioridad, porque suceden las cosas que suceden, porque esto y no aquello.

Todo lo tenemos en nuestras manos, sólo nosotros como parte del espacio que nos rodea somos unicos y tenemos las capacidades de cambiar y manejar nuestro propio destino y por ello mismo nuestro propio origen; porque todos los caminos tienen doble sentido, de ida y de vuelta.

Aunque vivamos en dimensiones paralelas todos compartimos un mismo origen y unas mismas ideas o sueños a lograr.

Esa es la esencia del ser humano.

Y si la fecha vivida solo fuera un reflejo.

O si nos hubieran inyectado una dosis de fantasia, efimera, pero cierta.

Y si el acontecimiento ya hubiera pasado y con ello estamos distorsionando el presente, pasado y futuro.

Y si la realidad fuera sueño, o el sueño realmente fuera realidad, y todos estemos viviendo, con lo que conlleva en un mundo imaginario, superfluo, abstracto.

En el fondo somos una parte del todo y de la nada.

En fin: solo ha sido un sueño.